Pese haber llevado una resolución de parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas donde 12 de los miembros votó a favor para intervenir en la guerra en Palestina, con el voto en contra de Estados Unidos fue anulada la iniciativa de la ONU.
Estados Unidos ha vetado una resolución presentada por Brasil al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Esta resolución buscaba revocar la orden impuesta por Israel de evacuar todas las zonas al norte de Wadi Gaza y reubicarse en el sur de la franja.
La resolución S/2023/773 también pedía pausas humanitarias para permitir el suministro de ayuda a civiles por parte de las agencias de socorro de las Naciones Unidas, el Comité Internacional de la Cruz Roja y otras organizaciones. Además, alentaba el establecimiento de corredores humanitarios.
En consonancia con la resolución propuesta por Rusia, esta resolución también solicitaba el suministro de bienes y servicios esenciales a los civiles, como electricidad, agua, combustible, alimentos y suministros médicos, con el fin de garantizar su supervivencia y evitar su privación de objetos indispensables.
En una reciente resolución presentada por Brasil, el Consejo de Seguridad condenó los ataques perpetrados por el grupo militante Hamás contra Israel el 7 de octubre. Además, la resolución pedía la liberación de los rehenes israelíes y solicitaba que todas las partes involucradas en el conflicto respetaran el derecho internacional y humanitario.
Durante la última votación del texto, que fue redactado por Brasil, se produjeron dos aplazamientos en los últimos días. Esto se debió a los intentos de negociación por parte de Estados Unidos para garantizar el acceso de la ayuda a la Franja de Gaza. En la votación final, doce miembros votaron a favor del proyecto de texto, mientras que Rusia y el Reino Unido se abstuvieron.
"Estamos sobre el terreno haciendo el trabajo duro de la diplomacia. Creemos que debemos dejar que esa diplomacia avance", dijo la embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Linda Thomas-Greenfield, a los 15 miembros del Consejo tras la votación.
Washington protege tradicionalmente a su aliado Israel de cualquier acción del Consejo de Seguridad, siendo lo anterior reprobado por el embajador de Rusia.
"Acabamos de ser testigos una vez más de la hipocresía y el doble rasero de nuestros colegas estadounidenses", dijo el embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, hizo un llamado el miércoles a un alto el fuego humanitario inmediato para permitir la liberación de los rehenes y facilitar el acceso de la ayuda humanitaria a Gaza.
Rusia informó que ha solicitado una sesión especial de emergencia sobre el conflicto en la Asamblea General de la ONU, compuesta por 193 miembros. En dicha reunión, podrían considerar someter a votación un proyecto de resolución, en el cual ningún país tendría derecho de veto.
Es importante destacar que las resoluciones de la Asamblea General no son vinculantes, pero sí tienen un peso político significativo.
El enviado de la ONU para la paz en Oriente Medio, Tor Wennesland, advirtió al Consejo de Seguridad sobre el riesgo "muy real y extremadamente peligroso" de que el conflicto se intensifique y se extienda aún más.
"Me temo que estamos al borde de un abismo profundo y peligroso que podría cambiar la trayectoria del conflicto palestino-israelí, si no de Oriente Medio en su conjunto", sostuvo Wennesland, dirigiéndose al Consejo desde Doha.
El embajador chino ante la ONU, Zhang Jun, acusó a Estados Unidos de generar expectativas sobre la adopción de la resolución, ya que durante las negociaciones no expresaron su oposición. Zhang Jun calificó la votación como "poco menos que increíble".
Por su parte, la embajadora estadounidense Linda Thomas-Greenfield expresó su decepción porque el proyecto de resolución no mencionaba el derecho de autodefensa de Israel. Además, culpó a Hamás por la crisis humanitaria en Gaza.
La comunidad internacional ha centrado sus esfuerzos en negociar una pausa humanitaria en las cercanías del paso fronterizo de Rafah, entre Egipto y Gaza, para permitir la entrega de ayuda. Aunque Egipto afirma que el paso de Rafah no ha sido cerrado, los ataques aéreos israelíes en la Franja de Gaza han inutilizado el acceso.
El proyecto de resolución también instaba a Israel, aunque sin mencionarlo directamente, a revocar su orden de reubicación de civiles y personal de la ONU en Gaza hacia el sur del enclave palestino. Además, condenaba los "ataques terroristas de Hamás".