La Hoguera
Emmanuel Ameth
Tras confirmarse en las candidaturas a diputaciones hidalguenses que José Francisco Olvera Ruiz se ha quedado sin espacios en la política local para él y sus allegados, siendo también echado por la puerta de atrás del PRI en la Ciudad de México, el exgobernador de Hidalgo busca actividad y refugio en el priismo del Estado de México.
En Hidalgo, los desencuentros con el exgobernador Miguel Ángel Osorio Chong y posteriormente con Omar Fayad Meneses le mantuvieron vetado de la política.
En la Ciudad de México, la animadversión con Cuauhtémoc Gutiérrez -hoy prófugo de la justicia- e Israel Betanzos también le negaron cualquier tipo de cuota en el partido.
Su última oportunidad era conseguir algún espacio para él o uno de sus allegados en las candidaturas a diputaciones locales -las federales eran impensables-, que le permitieran un margen de maniobra ante las investigaciones que siguen su cauce respecto la Estafa Maestra.
Pero más que quedarse sin una candidatura plurinominal se quedó sin aliados y ahora apuesta al Estado de México.
Es allí donde se ha vendido como ’mentor’ para campañas políticas y se ha acercado a Guillermo Zamacona, una de las personas de mayor confianza para Alfredo Del Mazo, quien como único objetivo tiene el de mantener al priismo en la región para conservar poder y hasta impunidad ante un futuro no muy brillante.
Olvera Ruíz se habría hecho pasar por artífice del triunfo del priismo hidalguense, aprovechando que sus interlocutores desconocen que poco o nada tuvo que ver en dicho proceso electoral. Ya reconocerán en carne propia los costos del auxilio del personaje hidalguense que inició su travesía chamaqueándolos.