La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) invalidó la primera parte del Plan B de la Reforma Electoral, con nueve votos a favor y dos en contra, con lo que la institución tomó atribuciones que no le corresponden y se impuso a la voluntad del pueblo, el cual está representado en las distintas fuerzas que integran el Congreso de la Unión.
Justificaron que la invalidez se señaló por violaciones graves al proceso legislativo, por lo que los ministros Alberto Pérez Dayón, Margarita Ríos Farjat, Juan Luis González Alcántara Carrancá, Javier Laynez Potisek y la ministra presidenta Norma Lucía Piña Hernández votaron por la acción de inconstitucionalidad.
Entre las violaciones señalaron que no hubo igualdad para la deliberación de esas leyes entre todas las fuerzas políticas y se reformaron más de 300 artículos en un lapso menor a cuatro horas, lo que generó que los diputados no conocieran ni analizaran lo que votaron.
Por su parte, la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal señaló, previo al debate, que de declararse inválido el Plan B de la Reforma Electoral, la SCJN incurriría en sustituir al Congreso de la Unión.
Tanto el Ejecutivo como el Legislativo son electos por el pueblo respondiendo al principio de autodeterminación, en los integrantes de la Suprema Corte no vienen de un proceso de elección directa.