Los aspirantes a candidaturas y cargos de elección popular que enviaron a sus esbirros a tomar la sede estatal de Morena Hidalgo para hacer labores de presión, se quedarán con las manos vacías: el Tribunal Estatal Electoral de Hidalgo (IEEH) determinó regresar la presidencia del Comité Ejecutivo Estatal a Sandra Ordóñez Pérez, al secretario General Sergio García Cornejo y a la secretaría de Organización Alejandrina Margarita Franco Tenorio.
La autoridad determinó que los señalados, destituidos en febrero por un resolutivo de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia (CNHJ), efectivamente cometieron un agravio al publicar una convocatoria que no cumplió con los tiempos que marcan los estatutos al faltar un día para celebrar las elecciones, fundando la queja pero siendo esta inoperante al haber un quórum legal.
De esta forma la veintena de militantes y simpatizantes que mantienen tomadas las oficinas de Morena Hidalgo se quedaron sin respaldo legal alguno si bien existe aún otra instancia para llevar a cabo su querella.
Mediante un escrito firmado por sólo 37 personas pretendieron desconocer a la dirigencia estatal e incluso ’nombraron’ una interina, todo esto a menos de 80 días de celebrarse las elecciones y a pocos de que se conozcan quiénes son los candidatos a competir por los distintos distritos locales y federales.
Algunos de los manifestantes que prácticamente estaban descartados a competir por su falta de simpatías dentro y fuera del partido, incluso se inscribieron como suspirantes a algún cargo de elección popular por la vía plurinominal, toda vez que el proceso de insaculación permitía que prácticamente cualquier militante se pudiera inscribir e incluso pudiera ganar así fuera completamente desconocido.
Será en las próximas horas que la dirigencia estatal emita un posicionamiento para retirar a la minoría que mantiene ocupadas las instalaciones de Morena en Hidalgo.