Para poder retener el gobierno de Hidalgo, la alianza conformada entre el PRI-PAN-PRD tenía una sola misión, que era la de reducir la diferencia en preferencias con la alianza morenista para posteriormente intentar ’dar vuelta’ a los resultados; sin embargo, les ha salido mal y cada vez miran más lejano su propósito.
De acuerdo con el último estudio publicado por Demoscopia Digital, a 70 días de llevarse a cabo los comicios, las preferencias han aumentado la brecha entre una y otra alianza, por lo que la misma se encuentra más cerca de llegar a las 30 unidades que de reducir las 20.
Del lado de Morena, PT y NAH, las preferencias brutas alcanzan los 48.1 puntos, mismos que se traducen en 59% en términos efectivos.
En el caso del PRI-PAN-PRD, las preferencias brutas son del 25.9%, los cuales se convierten en 31.8% en términos efectivos.
Es así que la distancia entre una y otra alianza es de 27.2 puntos -22.2 brutos-, superior a los ejercicios anteriores donde apenas se rebasaban los 20 puntos.
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La desventaja que tiene el partido en el poder en este momento no sólo no la había tenido nunca sino que es inmensa de acuerdo con la medición de Grupo Impacto.
De acuerdo con la encuestadora, Morena goza del 59% de las preferencias efectivas (35% brutas) mientras que el PRI-PAN-PRD alcanza el 25.4% (15% brutas), dando una diferencia incluso superior a los 30 puntos.
