En sesión solemne, la LXV Legislatura del Congreso del Estado de Hidalgo entregó la presea Pedro María Anaya en su edición 2022 a la historiadora y académica, Rocío Ruiz de la Barrera y en su edición 2023 al compositor Jaime Flores Monterrubio.
Como testigos del acto estuvieron presentes el gobernador, Julio Menchaca Salazar y la presidenta del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura, Rebeca Aladro Echeverría.
El presidente de la Junta de Gobierno, Julio Valera Piedras, señaló que la entrega de la presea Pedro María Anaya es un reconocimiento al valor y a la constancia que ha caracterizado a las y los hidalguenses en la historia de la entidad. Es un reconocimiento a quienes con su obra y aportaciones benefician a Hidalgo.
Reconoció el trabajo de las y los integrantes de la comisión especial para el otorgamiento de la presa Pedro María Anaya, quienes realizaron un trabajo detallado y profesional de selección.
Valera Piedras celebró que la medalla sea recibida por dos talentosos hidalguenses: Rocío Ruiz de la Barrera y el compositor, Jaime Flores Monterrubio, pues sus trayectorias dan cuenta del talento, constancia y sobre todo de la voluntad para seguir adelante.
Los galardonados dan muestra que el binomio talento con trabajo son condiciones necesarias y suficientes para impulsar el desarrollo personal y social del estado.
Por su parte, el gobernador de Hidalgo, Julio Menchaca Salazar, reconoció a los galardonados pues son ejemplo de lo que aspiran las y los hidalguenses: mejores condiciones de vida, en un anhelo y esperanza de un estado con desarrollo.
En su mensaje, el mandatario estatal resaltó la solidaridad del Congreso de Hidalgo con el gobierno que representa pues las decisiones tomadas en el pleno forman parte del presente y futuro de la entidad, esto significa la existencia de una misma sintonía con el respeto a las diferentes ideologías de las fuerzas políticas.
’Ese trabajo lo reconozco y aprecio, ofrezco que sigamos en esa misma ruta porque no hay mezquindad, hay compromiso serio y profundo’, señaló.
Después de recibir la medalla y pergamino por parte de las autoridades, Rocío Ruiz de la Barrera, agradeció el reconocimiento, al tiempo afirmó que asistió a la ceremonia como orgullosa ciudadana hidalguense, comprometida con Hidalgo de manera permanente desde los diferentes espacios donde ha estado.
Rocío Ruiz de la Barrera, originaria de Pachuca de Soto, Hidalgo, nació el 27 de noviembre de 1959. Ha tenido una formación académica en el ámbito de las ciencias sociales, autora y coautora de varios libros, ex funcionaria pública en diferentes administraciones estatales.
Por su parte, Jaime Flores Monterrubio, quien nació el 21 de agosto de 1968 en Huejutla, se comprometió ante diputadas y diputados a honrar la presea hasta el último día de su vida y la recibió en nombre de todos los compositores hidalguenses.
Además dijo que apoyará los sueños de jóvenes compositores que hacen nueva música que representan a la cultura de la entidad.
Flores Monterrubio a la edad de 7 años comenzó a cantar en un grupo integrado por familiares y amigos, y a los 8 compuso su primera canción Mi María. Aún no dejaba atrás la infancia cuando grabó su primer disco como solista y así inició su vida en el medio y empezó a actuar en palenques y teatros del pueblo, alternando con artistas como Yuri, Estela Núñez, Chayito Valdez, Pedro Fernández y Denisse de Kalafe, quien lo amadrinó en un palenque de su tierra natal.
En 2021 su canción Desde la raíz, fue tema oficial del Bicentenario de la Consumación de la Independencia de México, interpretada por él mismo, en el magno evento en el zócalo de la Ciudad de México.
En la sesión solemne estuvieron presentes los presidentes municipales de Pachuca y Huejutla, Sergio Baños y Daniel Andrade Zurutuza, respectivamente, la titular de la Secretaría de Cultura estatal, Tania Meza Escorza, entre otras personalidades.