El día de hoy durante la comparecencia del Secretario de Gobierno Simón Vargas, la sesión se vio suspendida al final de la misma luego de que acarreados, presuntos trabajadores de Gobierno del Estado, elevaran los ánimos en sus porras al Secretario y en sus abucheos para quienes les cuestionaran, no llevándose el protocolo del acto.
Para la comparecencia del Secretario fueron registrados 17 diputados para la realización de preguntas, pero solamente Ricardo Baptista pudo hacer uso de la voz, luego de que los morenistas se levantaran al considerar que los asistentes rompían con el protocolo de respeto.
Si bien no hubo episodios de violencia y ni las rechiflas ni las porras impedían seguir con la actividad, tras un receso por falta de quórum, el mismo no volvió a completarse, a lo que los asistentes aplaudieron que la comparecencia terminara.
"Las comparecencias son un ejercicio democrático, incluyente y de rendición de cuentas. Cuando se abrieron las puertas del Congreso fue para recuperar lo que antes ya se había hecho, es la casa del pueblo. Hubo una equivocación del compareciente porque llenó el pleno con gente que iba a escucharlos y la confundió con una pasarela, eso no se vale, vinieron funcionarios todos en horas de trabajo, muchos de los cuales identificamos como los que vinieron a golpear el año pasado. Desde el principio empezaron a chiflar y abuchear, intimidación menor, no nos preocupó en ese momento nuestra integridad, pero en el transcurso de la comparecencia se subieron los ánimos. No entendieron que no es un día de campo, pero tampoco un fusilamiento", narró Ricardo Baptista, diputado de Morena.
Baptista dijo que cuando se encontró con Vargas, este le expresó "me trajiste a una celada", a lo que el legislador respondió que no era más que una comparecencia
"No es un ring político; cuando ya te chiflan, te gritan… eso lo convirtió en un circo con golpeadores y funcionarios, entonces hay una responsabilidad del lado de quien compareció. Las preguntas fueron documentadas y con absoluto respeto, pero las respuestas no correspondían al juramento que hizo", dijo Baptista, quien añadió que los comparecientes "no pueden venir a mentir", en alusión a un documento firmado por Simón Vargas donde se comprometió a dar apoyos, discrecionales, por 100 millones de pesos y que negó durante el acto.
Segunda vez que se revienta la comparecencia
De las 4 comparecencias que se llevan hasta el momento, dos se terminaron por falta de quórum. La primera de ellas fue cuando los diputados del PRI, PAN, PES y PT abandonaron la sesión, aparentemente porque las preguntas comenzaron a ser incómodas para el invitado.
La segunda fue la del día de hoy, donde según la versión de los morenistas, no había las condiciones para llevar a cabo el ejercicio democrático de rendición de cuentas ante el poder legislativo.
Algunos asistentes presentaron como muestra del acarreo la presencia de personajes que deberían estar laborando a esas horas a la vez que identificaron a otros asistentes durmiendo para probar el acarreo.