A una parte importante de la población de Pachuca parece no hacerles mella alguna el llamado a quedarse en casa y a no congregarse en multitudes, al menos así sucedió en la Central de Abastos de Pachuca así como en la iglesia de San Judas Tadeo ubicada en Mineral de la Reforma.
Quadratín constató que a los ciudadanos poco les importó que la entidad se encuentre en semáforo naranja, pues abarrotan con regularidad la Central de Bastos.
Y eso no es todo, pues también evidenció que el llamado ’Operativo escudo’ se quedó en discurso, toda vez que dentro de las instalaciones no se sigue medida sanitaria alguna ni d ellos consumidores ni de los locatarios, además de haber retirado tanto el hule en los accesos como los arcos sanitizantes.
Por su parte Criterio cubrió la congregación de cristianos de la rama católica que se reunieron en la iglesia de San Judas Tadeo, pese a los llamados a evitar dicho tipo de actos.
Si bien cerca del edificio ya no se instaló la tradicional feria por el fenómeno del COVID, ello no impidió que los fieles se dieran cita en la iglesia e incluso hicieran largas filas para poder dejar sus ofrendas al santo.
Cabe señalar que el semáforo COVID, mismo que ha sido replicado en la Unión Europea, permanece en color naranja, equivalente a un alto riesgo de contagio; incluso, diversos países del mundo han decretado nuevamente la suspensión de actividades antes esta segunda o tercer ola por COVID que enfrentan.