El panorama para cerrar 2020 en Hidalgo es negro. Los últimos días se registró el mayor pico en contagios en lo que va de la pandemia y no por ello dejaron de celebrarse reuniones masivas, algunas incluso promovidas por las autoridades como lo fueron las tomas de protesta de los integrantes de los ayuntamientos que ganaron las elecciones la jornada del 18 de octubre.
Será entre hoy y mañana que se conozca si Hidalgo permanece en semáforo naranja así como las medidas que se tomen desde el ejecutivo estatal para mitigar la rápida propagación del COVID.
De acuerdo con la información oficial, entre el 6 y el 15 de diciembre el número de personas diagnosticadas con COVID en la entidad pasó de 20 mil 584 a 21 mil 797, es decir, alrededor de 120 personas diarias.
Es por lo anterior que ya se han anunciado medidas para giros no esenciales de la economía para restringir su actividad, aunque la medida es criticada en redes sociales derivado de que se dio después de que vinieran las tomas de protesta de los alcaldes que estarán en funciones hasta 2024. Afortunadamente, por cada 10 personas detectadas, solamente una habría fallecido en promedio, lo que muestra que el personal de Salud cada vez se encuentra mejor especializado.
Pero la gente no pone de su parte.
En diversos medios se han dado a conocer las aglomeraciones que se presentan en diversos puntos de la entidad, especialmente en Pachuca, donde incluso han sido captadas personas que pasean en familia sin las condiciones de sanidad recomendadas.
Hasta este momento hay 14 hospitales que se encuentran saturados en cuanto a camas para disponibles para atender pacientes además de otros 6 que están en camino a hacerlo según el Sistema de Información de la Red IRAG.
Por si fuera poco, el estudio ’Recopilación de información de los panteones públicos en las zonas metropolitanas del país 2020’ elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) puntualiza que de 15 panteones que existen en las Zonas Metropolitanas (ZM) de Hidalgo, al menos 7 de ellas carecen de espacio para recibir nuevos ’huéspedes’.
En ese tenor, la ZM Pachuca es la más afectada: los panteones municipales e Pachuca, Mineral del Monte, San Agustín Tlaxiaca y Zapotlán de Juárez, carecen de espacios para recibir más difuntos, teniendo como opciones Epazoyucan, Mineral de la Reforma y Zempoala, aunque este último con sólo 15 espacios.
En la ZM Tula ya no hay lugar en Atotonilco de Tula y Tula de Allende y tampoco lo hay en la cabecera de la ZM Tulancingo.
La opción que queda a los familiares de quienes desafortunadamente pierdan la vida por COVID o por cualquier otra causa son los panteones particulares, aunque los precios de estos oscilan entre los 90 y los 500 mil pesos para nichos individuales y familiares, a diferencia de los públicos donde el espacio se puede encontrar desde los 20 mil pesos.
