El gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo presentó una estrategia para prevenir y combatir la corrupción, fortaleciendo la nueva Secretaría Anticorrupción y de Buen Gobierno, la cual integrará las funciones del INAI.
Raquel Buenrostro Sánchez, Secretaria de la Función Pública, planea reestructurar la Administración Pública Federal en los primeros 100 días, reformar la Ley de Adquisiciones y la Ley de Obras, y recuperar el portal Compranet para la supervisión ciudadana de los contratos estatales.
El cambio de nombre de la Secretaría de la Función Pública (SFP) a Secretaría Anticorrupción y de Buen Gobierno busca transformar su enfoque, cerrando la puerta a la corrupción y combatiendo la impunidad mediante la transparencia.
La Secretaria recordó que entre las primeras estrategias del Presidente Andrés Manuel López Obrador para combatir este problema estuvo la entrega directa de los recursos de programas sociales, para así evitar intermediarios. ’Podemos asignar más dinero a más gente’, expresó. También destacó que se eliminó la condonación de impuestos y se adoptó la austeridad republicana.
’De los resultados de esta primera estapa, vemos que la tasa de los actos de corrupción disminuyó 11 por ciento. Es decir, de quince de cada 100 personas que en al menos un trámite vieron o persivieron un acto de corrupción, se reduejeron a 14, que es una disminucion del 11 por ciento’, apuntó Buenrostro.
La nueva Secretaría buscará transitar de un enfoque correctivo a un enfoque preventivo. Se trabajará con la ciudadanía, con el sector privado, y con las y los funcionarios de la Administración pública, a la vez que la instancia tendrá un enfoque transversal.
Raquel Buenrostro explicó que hay 10 pilares que se desarrollarán a lo largo del sexenio para prevenir y combatir la corrupción. ’Lo primero es dignificar la carrera del servicio público. Tenemos que entender que trabajar en el Gobierno es un servicio. Tener que invertir muchísimo en la formación ética y de integridad del servidor público, y acompañarlo de capacitación técnica’, apuntó.
– Dar acompañamiento preventivo a las instituciones y blindar programas prioritarios desde el comienzo para inhibir la corrupción.
– Modernizar la Auditoria Superior de la Federación.
– Consolidar compras públicas transparentes a precios justos.
– Transparencia proactiva.
– Sumar a la sociedad y al sector privado en el combate a la corrupción.
– Enfocar los Órgano Interno de Control (OIC) en áreas de mayor impacto y relevancia.
– Fortalecer la cultura de la denuncia.
– Realizar investigaciones que inhiban la corrupción.
– Combatir la impunidad al hacer que violar la Ley sea más caro que cumplirla.
La Secretaria explicó que se modernizará la Auditoria Superior de la Federación (ASF) para inhibir la corrupción y eficientar su desempeño. La Agencia de Transformación Digital ayudará a que los trámites sean más rápidos, puedan realizarse en línea y no haya intermediaros que puedan caer en actos de sobornos o de discrecionalidad. ’Tenemos que hacer que violar la Ley sea más caro que cumplir con la Ley. Que no haya ningún incentivo para violar la Ley’, añadió.
En la Administración de Sheinbaum se consolidarán las compras públicas transparentes, a precios justos, y se dará un seguimiento a los recursos para detectar las irregularidades, incluso en el momento en el que todavía ocurran, y no después. Desde Palacio Nacional, se planteó mecanismos de adquisición nuevos, como la subasta, para reducir los precios en los que el Gobierno adquiere un servicio.
La Secretaria Anticorrupción y de Buen Gobierno trabajará de la mano con la Consejería Jurídica y la Subsecretaria de egresos de Hacienda para tener una organización más eficiente. En los primeros 100 días, Buentrostro dará acompañamiento a proyectos prioritarios el Tren Maya.