Integrantes de la Red Comunitaria de Mujeres de la localidad Ejido 3 de Marzo, del municipio de San Felipe Orizatlán, participaron en el taller para la preparación de cacahuate enchilado, como parte de las acciones que impulsa el Instituto Hidalguense de las Mujeres (IHM) en diferentes regiones del estado.
Lo anterior, en el marco de la estrategia territorial para la reactivación de la autonomía y el empoderamiento económico, que coordina el Instituto Nacional de las Mujeres en 128 municipios del país, cuatro de ellos de Hidalgo: Chapulhuacán, Tenango de Doria, Acaxochitlán y San Felipe Orizatlán.
La estrategia denominada ’Nodos económicos’ se realiza a través de los Centros para el Desarrollo de las Mujeres (CDM). De los 17 que opera el IHM, los cuatro mencionados tienen la función de capacitar, asesorar y acompañar a quienes deseen comercializar productos o servicios; para ello, cuentan con personal especializado en materia de economía, finanzas y administración.
Esta es una acción coordinada entre la federación, las entidades y los municipios, recordó la encargada del IHM, Katya Gabriela Hernández Pérez, quien supervisó el trabajo que realizan asesoras y usuarias en la zona Huasteca.
La servidora pública las exhortó a participar activamente en la toma de decisiones, ponerse en el centro de las prioridades y a mantener la dinámica de colaboración y sororidad que las caracteriza, para que los emprendimientos sean exitosos:
’Es una forma de desarrollo principalmente para ustedes, pero contribuye al crecimiento económico de sus familias, de sus comunidades y del país’, enfatizó.
En esa comunidad se conformó el Comité de Contraloría Social, encargado de vigilar la transparencia de los recursos, el cumplimiento de objetivos y la pertinencia de los proyectos a emprender.
Este comité quedó integrado por Elizabeth Alvarado Hernández, como presidenta, mientras que Arely Ramírez Torres y Gregoria Hernández Hernández, fungirán como vocales. Las tres manifestaron su interés de generar ingresos propios, pero también de fomentar la convivencia entre ellas.
Mencionaron que la confianza en este modelo de proyectos les ha arrojado resultados positivos, pues algunas ya comercializan mermelada, producto que aprendieron a elaborar en talleres anteriores.
La red del Ejido 3 de Marzo está conformada por alrededor de 20 mujeres y otras tantas provienen de Hueytlale, otra comunidad del mismo municipio.