Dos semanas después de que la secretaria general del PRI Carolina Viggiano se registrara como candidata a la gubernatura por la coalición ’Va por Hidalgo’, el oficial mayor del gobierno estatal, Martiniano Vega Orozco, ni tardo ni perezoso comenzó a realizar operaciones inusuales desde la dependencia a su cargo para repartir terrenos a diestra y siniestra, una versión actualizada del tristemente célebre ’Año a la Hidalgo’.
Y es que aún sin conocer los resultados que traería la contienda, el camino estaba claro: o se cumplían los pronósticos y aplastaba el candidato de la 4T Julio Menchaca, o bien lo hacía Carolina Viggiano; en ambos escenarios, los grupos políticos son contrarios a la actual administración y por ello Martiniano metió el acelerador para realizar lo que podrían ser sus últimos movimientos en la administración pública.
En esta primera parte de la investigación realizada por EA Noticias se dará parte sobre donaciones y compraventas cuya justificación no sólo raya en el absurdo, sino en la indignación de un pueblo que en junio pasado clamó un rotundo ¡basta! desde las urnas.
Como cuento de hadas, familia “descubre” propiedad décadas después y recibe terreno residencial de la mano de Martiniano
El 20 de junio de este mismo año, en el Periódico Oficial del Estado (POEH) se publicó un decreto mediante el cual se hace constar que Martiniano Vega Orozco solicitó al gobernador Omar Fayad la elaboración y publicación del mismo para transmitir mediante dación el inmueble identificado como “Fracción B” de la Fracción M-II del Fraccionamiento Hacienda “La Herradura”, con una superficie de 6 mil 250 m2, en favor de María del Pilar Ramos Mancilla, así como de Dulce María Olivia, Genoveva Agustina María del Socorro y de Francisco Víctor Manuel, todos de apellido Mancilla Flores.
Es la historia detrás de la dación de dicho terreno, ubicado en zona residencial además, la que parece un cuento de hadas.
Y es que los beneficiarios de apellidos Mancilla Flores así como la referida Ramos Mancilla, descubrieron, 32 años después de que las instituciones educativas hidalguenses edificaran la Escuela Secundaria 10 “Ricardo Garibay”, que el terreno era de su propiedad, otorgándoles la escritura la notaria Lilia Reyes Morales en 2019 y registrándola en 2020, la misma que fuera funcionaria municipal, suplente de diputada federal e incluso senadora sustituta.
Fue en abril de 2022 que Martiniano Vega agilizó los procesos ante diversas dependencias para que finalmente en junio se emitiera el decreto para que en pago por los 5 mil 114 m2 ubicados en la popular colonia Nueva Francisco I. Madero, recibieran como pago y gananciales 6 mil 250 m2 pero estos ubicados en una zona residencial de alta plusvalía, teniendo también la suerte de que la operación se realizara a finales de la actual administración.
Otro terreno privilegiado para la secretaria de Finanzas
Hace un año la secretaria de Finanzas Delia Jessica Blancas Hidalgo estuvo en el ojo del huracán derivado de que fue beneficiaria de la donación de un terreno con superficie de 3 mil 050.611 m2, predio que se entregó a la Fundación Delia Hidalgo by Milka, la cual lleva el nombre de su madre (QDP).
La jugarreta estuvo en que la asociación se había constituido el 15 de julio del 2021 como lo muestra su RFC FDH210715GE1; pero apenas 5 días después (20 de julio), su “prestanombres” Ana María González Hernández, maestra en la Fundación Delia Hidalgo by Milka y también representante legal de “Asociación Milka Amor Constante AC”, quien además comparte dirección con “El Corazón de Lumardi” (CLU140807AS4) de Nayeli Islas Trejo, solicitó la donación del predio ubicado en Campo de Aviación 1, Carr. México-Pachuca Km 84.5, en propiedad del gobierno estatal por una anterior donación de la federación.
Sólo tres días le llevó a Martiniano responder al escrito con una solicitud a Coordinación Jurídica para que finalmente el 12 de agosto de 2021 se promulgara el decreto que dejaba a la Fundación Delia Hidalgo con la propiedad del inmueble, es decir, a menos de un mes de su constitución, representando un tiempo récord.
Pero la historia aún tendría capítulos qué escribir dada la complicidad del Oficial Mayor y la Secretaria, intermediando sus personeros.
Y es que otro decreto solicitado por Martiniano Vega narra cómo Iván Ariel Gutiérrez Chincolla, quien fuera subdirector en la Coordinación de Planeación Financiera de la Secretaría a cargo de Delia Jessica Blancas, además de representante legal de la empresa “Comercializadora IVKADI SA de CV” -que hasta el último día de junio suministró alimentos al Congreso con un contrato que superó el millón de pesos-, solicitó al gobernador Omar Fayad la necesidad de contar con un espacio de alrededor de 7 mil m2 para atender a la población en necesidad de tratamiento especializado para el buen desarrollo físico e intelectual.
El oficio fue ingresado el 8 de marzo de este año y nuevamente de manera expresa, el 24 de marzo, el oficial mayor Martiniano Vega solicitó a Coordinación Jurídica realizar los trámites para decretar una compraventa por 7 mil 465.32 m2.
Iván Ariel Gutiérrez Chincolla es hijo de Laura Elizabeth Chincolla Hidalgo, quien a su vez es directora general de la Fundación Delia Hidalgo by Milka y familiar directo de la secretaria Jessica Blancas.
De hecho tanto Chincolla Hidalgo como Blancas Hidalgo comparecieron como herederas ante un notario por los bienes de Delia Hidalgo Bardales (QEPD).
Es por esta situación que mientras al primer predio de 3 mil metros donado a Jessica Blancas vía Ana María González Hernández al menos una de sus colindancias daba con una vialidad -para tener entrada/salida-, el circuito SEPH al sureste, el predio de los 7.5 mil m2 tiene como único acceso el de la Fundación Delia Hidalgo by Milka -ninguno otro da con la vialidad-, es decir, que se encuentra exactamente atrás del previamente donado y solamente puede ser aprovechado por este.
Comercializadora médica recibirá terreno a precio de ganga: cinco veces por debajo del de mercado
Las tácticas ocupadas por Martiniano para beneficiar a particulares a costa del erario son variadas y diversas. Muestra de ello es que se puede celebrar un contrato de compraventa de un terreno con alguien ajeno a la estructura estatal y aún así concederle ventajas que no hallarían en ningún otro lugar.
Nuevamente el Oficial Mayor promovió un decreto para que en este caso la empresa Comercializadora Diclinsa resultara beneficiada, realizando trámites exprés para conseguir el objetivo de entregarle 5 mil 745.83 m2.
En este caso, la artimaña no se encuentra en el hecho de comercializar un terreno para atraer inversión, lo cual sería plausible, sino en entregar una extensión considerable muy por debajo del precio de mercado.
Documentos a los que este medio tuvo acceso muestran que la dirección de catastro del ayuntamiento de San Agustín Tlaxiaca practicó un avalúo al inmueble en cuestión y le asignaron un valor de 19 millones 600 mil pesos, lo que equivale a un importe de 3 mil 411.19 pesos por metro cuadrado.
En páginas como Inmuebles24 se puede apreciar que terrenos a pie de carretera en esa misma zona son comercializados a partir de los 14 mil pesos el metro cuadrado y sin que en los contratos existan condiciones tan benéficas hacia el comprador como lo que pretende el Oficial Mayor, esto es, sin garantía de “Conflicto social”, misma que obliga al vendedor (Gob. Estatal) a dirimir conflictos de cualquier índole así como a pagar cualquier tipo de costo o inversión que deriven de prácticamente contratiempo genérico.
Diclinsa figura con poco más de un centenar de contratos en diversas entidades del país y cerca de la mitad de ellos se han ejecutado en Hidalgo. La iniciativa QuiénEsQuién ubicó que la empresa de Aldo Agustín Melo Huesca comercializó pruebas médicas con 17 millones de pesos en sobrecosto.
Quién fuera como los propietarios de chalés. Les donan 4 hectáreas para su esparcimiento
El Oficial Mayor requirió un decreto para entregar 3.95 hectáreas al ayuntamiento de Omitlán para que este a su vez proporcione espacios de recreación y esparcimiento a los pobladores, lo que en el papel no tendría inconveniente alguno.
Pero el diablo está en los detalles.
El problema está en que el área se encuentra en un exclusivo desarrollo denominado Residencial Bosques de Omitlán, donde el mismo concepto de espacios es brindarle a los propietarios una superficie grande en la cual puedan edificar sus respectivos chalé y todavía les quede un espacio considerable, boscoso, para la recreación de sus familias ya sea como casa de descanso o como residencia habitual.
Así pues, no habría necesidad de concederles un espacio adicional tan extenso que no haya contemplado ya la desarrolladora a no ser que en realidad sea ocupado para fines distintos a los expuestos en el decreto como lo es la comercialización, toda vez que tanto el alcalde como Martiniano tuvieron también “prisa” en concretar la operación y confíen en que tal vez no habrá nadie que supervise que efectivamente se realizaron las obras en los dos años que tienen como límite para edificar las áreas de recreación para el exclusivo fraccionamiento.