La inflación en el mundo se ha disparado por una crisis en el precio de los productos agropecuarios, por la crisis de los contenedores, las cadenas de suministro y por el incremento de los energéticos, este último rubro dejando a México en especial vulnerabilidad por su dependencia del mercado internacional que fue acentuada con la Reforma Energética actual.
La inflación está en el ojo del huracán; desde Asia hasta América los precios continúan incrementando de manera importante, ejerciendo presiones a la economía global. En Europa los precios de los energéticos han disparado las facturas de los hogares y empresas.
En Estados Unidos los precios al productor continúan al alza y las gasolinas están encareciéndose. En México los agropecuarios y energéticos son los principales productos con alzas.
Así los bancos centrales alrededor del mundo se mantienen atentos a la evolución de los precios para tomar decisiones de política monetaria y compensar; como el retiro de estímulos o alzas en las tasas de interés.El Economista