La Hoguera
Tras la medida anunciada por los ayuntamientos de Pachuca, Mineral de la Reforma y Tulancingo sobre la restricción de horario en la venta de alcohol, cantineros y propietarios de bares señalaron que se perderían miles de empleos sólo en la capital hidalguense por la disposición oficial, lo cual es una mentira e incluso raya en el cinismo.
Primero porque ni siquiera son empleadas miles de personas en el giro.
Según el Directorio Estadístico de Unidades Económicas (Denue), la clave de Comercio al por menor de vinos y licores (461211) y de cerveza (461212), en Hidalgo hay 1,400 establecimientos de ambos giros; de ellos Pachuca tiene 156, Mineral de la Reforma 55 y Tulancingo 89.
En cuanto al giro de Centros nocturnos, bares y similares (7224), en Hidalgo hay 2,111 establecimientos. De los anteriores en Pachuca hay 267, Mineral de la Reforma 67 y Tulancingo 130.
Si tomamos el caso de Pachuca por ejemplo, suman 423 establecimientos, totales, todos los cuales registran además menos de 5 trabajadores, dando menos de 3 mil. Si se perdieran ’miles’ de empleos se hablaría al menos de 3 mil lo cual no sólo no cumple con ser una fracción de los que emplean sino que son más del total.
También está el tema de la clandestinidad. De los 429 permisos expedidos por el ayuntamiento, 69 son para bares y cantinas pero de ellos se han censado 156, es decir, que hay casi 100 clandestinos y/o que no cubren sus obligaciones con el ayuntamiento.
Además del cinismo de darle un agregado económico que no tiene a su sector y de exponer su nivel de clandestinidad, hay otros dos factores que hacen que sus argumentos caigan por su propio peso.
El primero de ellos es que a sus trabajadores no les pagan ni el mínimo y socializan su salario con las propinas. El bienestar de los mismos entonces para obtener un ingreso digno, ni siquiera depende de sus patrones.
El segundo es que justamente entre 10 de la mañana y hasta después de la comida -de las 4pm en adelante-, es un horario muerto.
El horario de venta ya estaba restringido hasta la 1 de la madrugada y a partir de las 10 de la mañana, por lo que pasarlo a las 2pm no es para nada la calamidad que los cantineros quieren hacer ver.
ATIZOS
Llama la atención que si lo que se quiere es restringir el horario no se considerara hacerlo a través de una iniciativa ingresada en el Congreso Local, probablemente por los costes políticos de realizarlo por esa vía al ser un tema si no trascendente sí mediático. Que los ayuntamientos lo realicen bajo modificaciones a su Bando de policía y buen gobierno no es una mala señal, pero sí revela que hay una mano detrás que no quiere mojarse.
Por cierto, en el segmento restaurantero (SCIAN 722511) hay 1,375 establecimientos en Hidalgo, de los cuales 333 son de Pachuca, 89 de Mineral de la Reforma y 116 en Tulancingo. Si no se incluyeron en los números anteriores es porque contemplan la preparación de bebidas tanto alcohólicas como no alcohólicas, sin mencionar que su principal apuesta es la de alimentos.