En Hidalgo la precariedad laboral impide que el ingreso del hogar sea dependiente de una sola persona, toda vez que de ser este el caso, ocho por cada 10 trabajadores estarían condicionados a pertenecer a la clase baja, revelan datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Y es que de acuerdo con los datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), los ingresos de los trabajadores son muy bajos.
La división de clases según el ingreso
En Hidalgo existen 1 millón 341 mil 696 personas ocupadas según el ENOE IT 2022.
El 51.7% de ellas gana hasta un salario mínimo mensual (693,094), lo que es menos de la mitad del ingreso medio que requiere un hogar ubicado en la clase baja.
El 76.3% percibe hasta 2 veces el salario mínimo (1,024,113), lo que es poco menos que la media del ingreso de las personas ubicadas en el estrato social más bajo.
Dado que el límite superior del ingreso de la clase baja se encuentra estimado entre los dos y los tres salarios mínimos, se estima que el 80% de los trabajadores en Hidalgo percibe un ingreso equivalente a la clase baja (1,074,113).
Bajo ese tenor, apenas el 19.9% de las personas percibe ingresos que los situarían dentro de la clase media y apenas el 0.1% tendría ingresos suficientes para ubicarse en la clase alta.
Afortunadamente para los hidalguenses y para el resto del país, el ingreso en los hogares no contempla el de una sola persona sino el familiar e incluso las transferencias (apoyos gubernamentales), por lo que al sumar lo anterior se obtiene que el 63.5% de los hogares pertenece a la clase baja, el 36.3% a la clase media y el 0.2% a la clase alta.