La base monetaria, compuesta por billetes y monedas en circulación, junto con depósitos bancarios de cuenta corriente, finalizó el 2023 con un saldo de 2 billones 960,305 millones de pesos, según informó el Banco de México.
Esta cifra representa un incremento del 10% con respecto al nivel al cierre del año 2022. Es importante señalar que este aumento supera más del doble la variación anual de la inflación, la cual se situó en 4.46 por ciento a la primera quincena de diciembre.
Al llegar al 29 de diciembre de 2023, la demanda de la base monetaria experimentó un incremento de 28,680 millones de pesos. Este fenómeno fue explicado por el banco central de la siguiente manera:
’La mayor demanda de efectivo en la última semana del año refleja, en parte, el efecto estacional asociado al feriado del 1 de enero’.
Este saldo de efectivo en circulación evidencia también el histórico ingreso de remesas que se ha presentado desde 2020 y que sigue rebasando su esterilización, explicó el experto en política monetaria y profesor emérito del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de México (ITESM), Raymundo Tenorio Aguilar.
’Seguramente se va a reportar un flujo anual de remesas de más de 58,000 millones de dólares, que representa más de 600,000 millones de pesos que ingresan. Porque entran dólares, pero se cambian por pesos. Entonces la base monetaria tiene que crecer’.
Un noviembre pasado, las remesas traían un aumento anual de 8,7% con un monto acumulado de 57.796 millones de dólares.
Entrevistado por El Economista, Tenorio Aguilar refirió que ’toda remesa que entra demanda pesos, emisión de billete y moneda y el banco central esteriliza parte de esas remesas emitiendo Bonos de Regulación Monetaria’.
Tal como lo explican Bruno Sevilla y Andrea Nuricumbo de la UNAM ’para evitar un incremento no deseado de la masa circulante en moneda nacional, las remesas se tienen que esterilizar colocando deuda pública’.
’Esos bonos atraen recursos de Afores, de inversionistas institucionales, no de la gente que está recibiendo una remesa. Por eso la base monetaria ha crecido a esa velocidad, por la entrada de remesas que son dinero líquido’.
El agregado monetario aumentó 23% en el 2020; 16,8% en el 2021 y de 10,6% en el 2022.
Si bien es cierto que el histórico flujo de remesas genera una esterilización en pesos, también hay que tomar en cuenta que el peso mexicano se ha fortalecido desde el último trimestre de 2022. Por tanto, se ha presentado una mayor entrada de dólares vía remesas, pero con menor valor en pesos. Se requiere saber qué proporción del circulante en pesos corresponde a la esterilización.
Tenorio sostiene que las remesas en pesos se vuelven dinero líquido que se convierte en consumo privado del mercado interior.
’Al haber más dinero circulando, justificada por esta entrada de remesas, provoca que haya exceso de dinero en circulación a pesar de la tasa tan alta de Banxico’.EL ECONOMISTA