Mediante diversos mensajes enviados a las Redes Sociales además de ponerse en contacto con la Redacción, familiares de internos en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Pachuca denunciaron que son objeto de prohibiciones en su alimentación para favorecer a la tienda que se encuentra dentro del reclusorio, la cual vende sus productos a sobrecosto.
Señalaron que son obligados a comprar en la misma sus insumos -con los que obtiene ingresos- y son amenazados con ser transferidos e incluso a algunos les han dejado sin darles agua porque ahora "deben comprarla".
Aquí uno de sus mensajes: