El Gobierno del Estado de Hidalgo ha demostrado su compromiso con la transia y la rendición de cuentas al lograr un cumplimiento superior al 99% en la presentación de declaraciones patrimoniales por parte de sus servidores públicos.
Este proceso, fundamental para garantizar la integridad y congruencia en el ejercicio de las funciones públicas, se llevó a cabo con éxito.
La Secretaría de Contraloría, a cargo de Álvaro Bardales, anunció que al 31 de mayo se alcanzó un hito: de los 83 mil 132 servidores públicos del Poder Ejecutivo con obligación de declarar, 82 mil 828 cumplieron.
Este logro no sólo evidencia la seriedad con la que se toma este ejercicio, sino también la voluntad de los servidores públicos de actuar con integridad y responsabilidad ante la ciudadanía
Cabe resaltar que, desde hace unos años, como un ejercicio de transparencia, la ciudadanía tiene acceso a lo manifestado por los servidores públicos.
El trabajo conjunto con la Secretaría de Educación Pública (SEPH) fue fundamental en la implementación de estrategias efectivas, lo cual se refleja en los resultados obtenidos: del padrón de 43 mil 505 personas obligadas de esta dependencia, 43 mil 230 cumplió con su declaración.
En otras entidades, como Salud (SSH), Seguridad Pública (SSPH) y la Procuraduría (PGJEH), se lograron altos niveles de cumplimiento. Es importante destacar que, si bien los resultados mejoraron significativamente con respecto al año anterior, aún existen casos de incumplimiento que requieren atención.
En el año inmediato anterior, 571 servidores públicos fueron sancionados por no cumplir con esta obligación, mientras que, en 2024, se registraron 304 incumplimientos. Es imperativo que aquellos que aún no hayan presentado su declaración lo hagan a la brevedad, ya que el término del plazo no exime de posibles sanciones.
En resumen, el alto cumplimiento en la presentación de declaraciones patrimoniales es resultado del esfuerzo conjunto de las instituciones y de la voluntad de los servidores públicos de actuar con responsabilidad y honestidad en el ejercicio de sus funciones.