Durante 2017 las entidades federativas destinaron en total 1,225.1 miles de millones de pesos (mmdp) para el Poder Ejecutivo, mientras que en 2018 se presupuestó para estos fines un gasto de 1,108.1 mmdp, lo cual significó una reducción del 9.6 por ciento en estos recursos en el presente ejercicio fiscal. Respecto al año anterior, Colima, Querétaro e Hidalgo fueron quienes más incrementaron su gasto.
De acuerdo a los Presupuestos de Egresos de 2018 elaborados por las 32 entidades federativas, los estados con las asignaciones presupuestales más altas para sus Poderes Ejecutivos son el Estado de México, Ciudad de México, Jalisco, Puebla, Michoacán, Guanajuato y Veracruz, las cuales fueron superiores a los 50,000.0 mdp cada una. Los elevados montos presupuestados para estas entidades federativas, se explican en buena medida por su alta densidad poblacional y extensiones territoriales, ya que tienen mayores necesidades de recursos para la provisión y mantenimiento de los servicios que les demandan sus grandes poblaciones, ya que cuentan con más de 4.5 millones de habitantes cada una.
Por su parte, los estados que tuvieron los menores montos asignados para sus respectivos poderes ejecutivos en 2018, fueron Nayarit, Tlaxcala, Campeche y Morelos, cuyos congresos locales presupuestaron menos de 6,000.0 mdp para cada uno. Estas entidades se caracterizan por tener poca población, inferior a 2.1 millones de habitantes, así como menores extensiones territoriales.
