La dirigencia nacional tricolor cuenta cada vez con menos aliados. El día de ayer fueron 260 los personajes relevantes del interior del país que se opusieron a que Alito Moreno cambie los estatutos para que pueda reelegirse hasta en dos ocasiones más, si es que para ese entonces y bajo su tutela todavía existiera el PRI.
Entre los firmantes destacó el caso del exgobernador hidalguense Manuel Ángel Núñez Soto, quien sería el segundo en hacerlo luego de que Miguel Ángel Osorio Chong también se enemistara con Alito y ello provocara incluso su renuncia al PRI.
De los 4 exmandatarios que siguen con vida, 2 están en contra de la dirigencia de Alito Moreno y Carolina Viggiano por ser la más perdedora que hayan tenido en su historia, en tanto Jesús Murillo Karam está más preocupado por gozar de la libertad recién conseguida para seguir llevando su proceso judicial por tortura.
Sólo Francisco Olvera estaría de lado de la actual dirigencia, pues le concedieron la oportunidad de ser humillado en urnas por la diputación federal de Pachuca, aunado a que todo su grupo político recibió también la oportunidad de perder en sus respectivas demarcaciones y/o de demostrar su poca valía como estructura.
Carolina Viggiano quiere permanecer en la dirigencia de la mano de Alito Moreno a toda costa, pues su intención es simplemente que el partido subsista por lo menos hasta 2028 y así pueda ser arropada nuevamente como candidata a gobernadora en la entidad para perder contra Simey Olvera, Tania Meza o cualquier otro perfil que elija Morena para ese entonces.