Acostumbrados a que la justicia nunca llegara, los exgobernadores de Hidalgo fueron unos maestros a la hora de servirse de sus cargos con la cuchara grande para el enriquecimiento personal, por lo menos hasta que la 4T llegó y ahora se les investiga directa e indirectamente para que finalmente pisen la cárcel por su probable enriquecimiento ilícito.
Para dos de ellos, las investigaciones ya cuentan con órdenes de aprehensión para sus colaboradores más cercanos mientras que para los otros dos, las investigaciones siguen su proceso para poderse judicializar.
En el caso de Jesús Murillo Karam, las órdenes de aprehensión contra Tomás Zerón y Cárdenas Palomino, excolaboradores que falsearon pruebas para imponer la “verdad histórica” fraguada por el hidalguense para exonerar a las autoridades federales y su participación, podrían derivar en su imputación con los hechos fatídicos.
Una vez que se consumen las órdenes y que su nombre salga a relucir, será cuestión de tiempo que la UIF congele sus millonarias cuentas y lo someta a proceso. Tomás Zerón sustrajo además, 1 mil millones de pesos de las arcas públicas.
Para Miguel Ángel Osorio Chong el próximo 9 de octubre será crucial, pues será cuando un juez determínela procedencia del amparo solicitado por su cercana colaboradora Frida Martínez, a quien se le acusa de haber desviado 2 mil 500 millones de pesos, entre otros cargos.
La aprehensión de la referida significaría un duro golpe para el actual senador plurinominal, siempre que es parte de su círculo más cercano y con ello podría conocerse el esquema de desvíos orquestado desde las más altas esferas del poder.
En conjunto, Murillo y Osorio son investigados por hacer un uso discrecional de al menos 44 mil millones de pesos.
Otro que se encuentra en la tablita es el exgobernador José Francisco Olvera Ruíz, toda vez que existen actualmente por lo menos 14 investigaciones en curso por malos manejos financieros durante su mandato y donde solamente han caído excolaboradores cercanos, que si bien denunciaron su participación, no se siguió la pista hasta el anterior mandatario de la entidad.
Son cientos de millones los que apuntan a sus cercanos Pedro Luis Noble Monterrubio, Edna Geraldina García Gordillo, así como a Aunard de la Rocha Waite, quienes habrían desvido en conjunto al menos 1.2 mil millones de pesos por órdenes de su jefe inmediato.
El último de los exgobernadores que podría pisar la cárcel si las investigaciones siguen su curso hasta las últimas consecuencias es Manuel Ángel Núñez Soto, toda vez que David Penchyna Grub es investigado por “regalar” 5 mil millones de pesos a una empresa como indemnización sin tener obligación contractual que respaldara su decisión.
La empresa favorecida por Infonavit hizo transacciones con desarrolladoras de vivienda con las que ambos políticos están en sociedad, aunado a lo que eventualmente se de a conocer sobre las transacciones realizadas por ellos y sus colaboradores en el GACM.
