Era agosto de 2012 cuando presuntamente por causa del alcohol, un accidente en la carretera México-Pachuca provocó la muerte de una persona cuyo nombre en vida era el de Máximo Gómez Ávila; el responsable, el entonces senador electo David Penchyna, quien mediante el uso de sus influencias no sólo salió impune de dicho accidente sino que la mirada de los medios se fijó en ’su estado de salud’ olvidando completamente al otro vehículo involucrado.
Hoy la Cámara de Diputados dio una muestra de que no se permitirán más ’penchynazos’ ni ningún otro acto de impunidad, así los señalados pertenezcan al partido mayoritario, declararon diversos diputados por su cuenta.
De ser cierto lo anterior, ya no saldrán publicaciones en los medios en las que se victimice a los agresores con tal de lavar su imagen, ni se minimicen a las verdaderas víctimas.
Priista de Oaxaca sigue impune
También en octubre pasado, el líder juvenil del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Oaxaca, Alfredo Delgado Cervantes, también a causa del alcohol, chocó con su vehículo contra un árbol y provocó la muerte de Silvia Ivana Mingo López, a la que abandonó a las puertas de un Hospital Civil.
El priista sigue impune.
Mingo López estaba dentro de un Jeep tipo Wrangler (una unidad oficial) y presentaba exposición de masa encefálica.
El implicado fue director de la juventud en el ayuntamiento capitalino y líder de la Red de Jóvenes por México del PRI. Delgado Cervantes, es hijo de la delegada estatal de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Rebeca Cervantes.
